Fortunato y Jacinto, dos felices ratoncillos que viven en el mercado de Vegueta, deciden visitar el nuevo Teatro Pérez Galdós. Pretenden cambiar su humilde residencia (un puesto de verduras), por esta lujosa mansión. Allí los recibe Marianela la Polichinela quien les advierte que el teatro está embrujado. Por la noche comienza la animación.
La ilustradora de esta obra es la pintora Marta Mariño.